23 febrero 2009

LA ESCOPETA NACIONAL

En los últimos días se ha hablado mucho de varias cacerías, y en especial, la del ya ex ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, la semana pasada en Jaén. A todos nos vino a la memoria días atrás aquella magnífica película que data del albor de la democracia (1978), La escopeta nacional, dirigida por Luis García Berlanga y con guión del eterno Rafael Azcona. Bermejo, que se había convertido en la diana de todas las críticas de Rajoy en las campañas gallega y vasca, ha abandonado el Ejecutivo para no dañar los ideales y la imagen de un partido que se enorgullece de ser diferente y contar con 130 años de historia. La fidelidad a unos principios lo atestiguan. Pero estos días también salieron a relucir otras cacerías, como las de Franco, las de los Borbón o las de Fraga en pleno desastre por el Prestige. Por tanto, Bermejo ya estaba advertido de que las cacerías cortesanas son prisiones donde el ambicioso muere. Las criticas recibidas por parte del PP no supusieron más que una réplica feroz. Fue el pronunciamiento adverso del socialista canario Jerónimo Saavedra lo que inició los desmarques dentro del PSOE y, por consiguiente, la caída de Bermejo, cuya labor como sostén argumentativo del Gobierno frente al PP en el Congreso ha sido importante. Ahora comprendo a Bono cuando decía que en el partido propio hay mucho hijoputa. El caso de la dimisión de Bermejo confirma la puntería periodística de Pedro Jota, y todo ello tan sólo unas semanas después de otro tema relevante: la dimisión del presidente del Real Madrid, Ramón Calderón. Ahora bien, de la guerra cainita abierta en el seno del PP al trascender el espionaje mutuo al que se dedicaban los hombres fuertes del Gobierno de la comunidad que preside Esperanza Aguirre, del llamado Aguirregate, nada escribió. En el caso están involucrados nombres como Francisco Granados e Ignacio González, vicepresidente primero y segundo de Madrid. Los de Álvaro Lapuerta, antiguo tesorero del PP, y Luis Bárcenas, el actual, también han salido a escena. Pero claro, este tema se silencia con la intención de deformar la opinión pública y anular la capacidad del ciudadano. Y así las cosas, apareció en tropel el juez Campeador, Baltazar Garzón, reactivando la instrucción de la Operación Gürtel (Correa en alemán), un caso de cine donde una pandilla de merodeadores del poder en tiempos de Aznar exhibía toda suerte de trapacerías. En mitad de tanta cacería, llega Cayo Lara con un conejo en la chistera y nos advierte de que "el capitalismo es incompatible con la democracia" o que "Cuba es el país a imitar". La licencia única de caza para seis comunidades, entre ellas Andalucía, algo que hubiese absuelto a Bermejo de todos sus furtivos pecados, ha llegado un día tarde. Lo que no sabemos es cuando llegará la libertad y la justicia social para el pueblo cubano, a pesar de los deseos del nuevo coordinador de IU. Que sea él quien lo diga me deja tranquilo, pues estoy convencido de que este señor no habla con Dios. Más me preocupa que desde ciertos sectores de la izquierda se tenga la impresión de que el caso Correa no les ha hace ningún daño a los populares porque con su estrategia están consiguiendo que cale la idea de que ellos son meras víctimas. Sucedió algo parecido con el caso Fabra o el caso Naseiro y el PP reforzó sus resultados electorales, algo muy diferente a lo que sucedió cuando los casos de corrupción rodeaban a la izquierda. Para el ácrata Chomsky, "quien domina la información, controla también en gran medida a la sociedad". Y sólo así se explica el silencio de Pedro Jota ante un caso tan denigrante como el Aguirregate, o que a la derecha le guste moverse en medio de la controversia y el ruido constante. Ellos son los que disparan con más fuerza . Ellos tienen la escopeta nacional.

20 febrero 2009

PALABRAS DE AMOR

Hubo un tiempo en que, como escribió Julie de Lespinasse, se amaba "como hay que amar: con exceso, con locura con desesperación". En Palabras de amor, su último libro, el filósofo José Antonio Marina ha buceado en más de 1.000 cartas de enamorados escritas a lo largo de 4.000 años para contestar la pregunta que lleva siglos haciéndose el hombre: cómo hacer que la pasión perdure. La pregunta no sería difícil de contestar si tus ojos no se hubiesen esfumado aquella tarde gris. Pero lo hicieron. Muchos meses después, cuando ya había dejado de escribirte cartas, poemas y canciones; cuando las amistades de noches noctámbulas y penurias ya se habían diluido (sin pretenderlo) y Madrid era la reina de todas las ciudades, de todos los recuerdos y de todas las adolescencias que persiguen un sueño, encontré aquel libro, como si hubiesemos estado predestinados. Al deslizar mis torpes manos sobre él, me acordé de aquella primera vez que nos besamos y nos dijimos te quiero. Fue en una habitación con vistas y tú cerraste los ojos, como queriendo grabar ese momento para siempre. Al igual que tú, y pretendiendo retenerte, cerré mis párpados cuando, al ojear las páginas de la nueva obra de Marina, leí en ella las tres primeras palabras, que inexplicablemente resultaron ser tu nombre, Roma y amor. Y así volviste una vez más hasta mí, sin saber el porqué, como cada vez que se avecina marea en el PP vuelve Esperanza Aguirre aspirando a ser la mesías de su partido. La lideresa dice asumir "responsabilidades políticas" con el cese del oscuro López Viejo. Rema a contracorriente y, en lugar de explicar a los ciudadanos el porqué del abandono del ya ex consejero de Deportes, Aguirre ataca ferozmente a los socialistas, ningunea al juez Garzón y llama a Bermejo "ministro furtivo". Ahora resulta que va a tener que ser Garzón el que pida perdón a los dirigentes del PP por descubrir como algunos hacen de su posición un lugar privilegiado mediante el cual llenarse los bolsillos. Para Aguirre sólo existe una verdad: "la corrupción suele ser cosa de los socialistas". Es cierto que los últimos gobiernos de Felipe González quedaron bajo sospecha. Entonces, el PSOE pagó las consecuencias de contar entre sus fieles con los fieles del interés propio, como fueron los ya conocidos Juan Guerra, Roldán, Barrionuevo, Vera o Mariano Rubio. Sin embargo, la corrupción no pertenece a ningún partido, sino que son elementos propios de la malicia y el egoísmo de los seres humanos. Quien esté libre de pecado que tire la primera piedra. Si a Aguirre le parece que entre sus militantes no hay personajes iguales, o peores, que los socialistos que he citado, va apañada. Si cree que ser del PP implica compromiso, honestidad absoluta y que a raíz de ello sus bases escriben odas y cartas de amor a sus máximas y a sus líderes, apaga y vámonos. No puede ser que esta mujer sea tan vil, tan provocadora y tan sectaria. Pues sí, señora, la trama de corrupción de Correa existió, benefició a muchos dirigentes de su partido, incluido a cargos de su Comunidad, que es jauja, y de Valencia. Y hasta ha salpicado a su homólogo valenciano, el bienaventurado Camps. Es de risa que los desmentidos ni tengan datos ni color. Y que se debata si Garzón es socialista o no lo es. Rídiculo me parece que el PP ponga en tela de juicio la actuación de la fiscalía contra sus cargos, y no se miren a sí mismos para advertir todo aquello que están haciendo mal. Rajoy decía el otro día que si Zapatero mantenía a Bermejo es porque ZP es como el ministro. Un silogismo estúpido. Yo podría decir ahora que si Rajoy mantiene a Fabra es porque el lider del PP es como el impresentable presidente de la diputación de Castellón, que ya "no sabe a cuántas personas ha colocado". El único error de Bermejo ha sido acudir a una cacería sin licencia, nada más. No vi a nadie del PP denunciar la cacería de Fraga cuando éste se encontraba en montañas no muy lejanas y desiertos remotos tras el caso Prestige. Ibarretxe "Nunca mais". Ésa es la propuesta que hacen estos días los socialistas vascos, pensando en las elecciones autonómicas del primero de marzo. Ahora que Patxi está cerca de ser lehendakari, los peneuvistas echarán en falta a alguien coherente como Josu Jon Imaz, que tuvo que abandonar su partido por la puerta de atrás. Ibarretxe se mantuvo con su plan soberanista, que nació muerto, se fraguó sin apoyos y que ahora reside en las clocas, donde presumiblemente morirá en esta nueva legislatura. Estos días el pueblo vasco susurra un canto que augura el cambio. Touriño, sin embargo, se ha olvidado de las esencias del socialismo entre despachos y coches inexpugnables, como si fuese a combatir a una batalla de una guerra que no le pertenece. Los carros de combate los pone el BNG cuando deriva el viaje a Portugal de unos jubilados y los hace bajar en Oia para que su líder, Anxo Quintana, ofrezca un mitín en el que procura no criticar a sus socios de gobierno, porque sólo un buen resultado del PSOE en Galicia le garantiza volver a ser vicepresidente. Un poco más hacia el este, pero siempre al norte, en un pequeño barrio obrero de Barcelona, una sonrisa me despierta de esta hibernización cuasi eterna. He estado demasiado tiempo persiguiendo pájaros etéreos atrapados en escarcha. Yo sé que tengo muchas cosas que decirle. Y ella también lo sabe. Pero esperaremos a que Underground sea el lugar común de todos los destinos y la Diagonal de la Ciudad Condal se convierta en nuestra Roma particular, allá donde confluyen todos los caminos. En las rutas de todas las guías de viaje aparecerán palabras de amor escritas un tiempo en que los sueños se bailaban en una pista de baile y amábamos "con exceso, con locura y con desesperación" en la soledad ardiente de nuestras íntimas madrugadas. Palabra.

18 febrero 2009

TARANTELLA

A pesar de que la vida no se escribe en verso, en ocasiones suceden cosas extraordinarias, como por ejemplo encontrar tus ojos deambulando entre las sábanas una mañana de mayo. Recordé, entre otras cosas, la primera vez que me fijé de veras en ellos, otro mes de mayo de hace ahora tres años. Mientras nos mirábamos, absortos, recuerdo que guardabas silencio. Al fondo estaba, con su reflejo tenue, el laghetto de EUR y, más allá, los destellos de una ciudad más eterna que nunca: el amor es el origen de la vida. Estábamos detrás de la carpa en la que Paola Serena despedía a sus últimos invitados, el día que se cerraba la campaña de las elecciones municipales en Italia. Mientras la gente se zampaba unos pastelitos y Ernesto vigilaba que todo estuviese a punto, recuerdo como cogí tu mano y nos alejamps de toda parlafernalia y de aquellos atrevidos bailes latinos que degustaban los asistentes. Nos adentramos en el parque, donde el frescor de la hierba fresca nos hizo sentir libres. Y entonces te hablé de mariposas, de guitarras roncas y magos sin chistera. Cuando terminé, nunca antes, comenzaste a tatarear una música pegadiza, una tarantella. Luego fueiste sublime: "este es el secreto de la vida". Mucho tiempo después sube que la tarantella es un baile popular del sur de Italia, como para nosotros los andaluces el flamenco. Se trata de un baile de origen napolitano que tiene un movimiento muy vivo. En su forma moderna más común, es una danza de galanteo entre parejas con un compás de seis por ocho que va aumentando progresivamente de velocidad. En aquellos momentos creías que una tarantella a tiempo era capaz de evaporar las penas y miserias. Y que algo así debía ayudar a Paola a ganar su puesto en il comune de Roma. Te basabas, quizá, en esa teoría que recorría las calles de la Italia sureña en la Edad Media, cuando la gente creía que con bailar una tarantella se curaban ciertos tipos de males. A pesar de leyendas y patrañas, entonar una tarandella no le bastado a Walter Veltroni para encadenar su enésimo fracaso. Lo que más me duele de todo esto es que al final tendrás razón y que una sonrisa de oreja a oreja se dibujará en tu rostro mientras yo sigo bebiendo miserias y recomponiendo este puzzle que dejamos a medio hacer. Tras dejar la alcaldía de la capital en octubre de 2007 para enfrentarse al todopoderoso Berlusconi en las generales como líder del artificial PD, mi admirado Walter sólo ha cosechado fracasos, algo que ya les ocurrió a los otrora líderes de la izquierda italiana que se atrevieron a dejar Roma para plantarle cara a Il Cavaliere. Hablo de Francesco Rutelli o de Massimo D´Alema. Esta vez, Veltroni dijo basta. Y lo hizo "para salvar el proyecto". La clara derrota de su candidato, Renato Soru, en las elecciones regionales de Cerdeña ante el candidato de Berlusconi, parecen haber deprimido el proyecto del grupo reformista. Antes de Cerdeña habían venido las varapalos de las generales y municipales de abril del año pasado, o las derrotas en las regionales de Friuli y Abruzzo. En todo este tiempo, el PD no ha logrado ser alternativa a Berlusconi, no se ha convertido en referente laico, no ha hecho verdadera oposición, no ha ofrecido soluciones a la crisis... Eso unido a que las luchas fratricidas han sido, en paralelo, salvajes, poco margen de maniobra deja a Veltroni. En los nueve meses que han pasado desde el último paseo de Berlusconi, Massimo d´Alema ha tratado de acercarse a la izquierda radical; Francesco Rutelli ha tendido puentes con los democristianos de Casini; los Democráticos de Izquierda de Piero Fassino se han alineado con los socialistas europeos, en contra de la línea oficial, los jerarcas napolitanos se han aferrado al poder de escándalo en escándalo y, los católicos, han votado con el Gobierno la ley del testamento biológico. Es difícil salir adelante con esta amalgama ideológica. No valdría ni el baile conjunto de una tarantella. Aquí nadie quiere bailar con la más fea. Pero lo que es más extraño, tampoco con la guapa. Todos quieren bailar consigo mismos, porque es la mejor manera de hacer carrera. El carisma del magnate italiano Silvio Berlusconi, parece resistir cualquier prueba. Elecciones, crisis económicas, recesión aguda... Poco queda de aquel optimista Veltroni que arrasaba en Roma con más del 60 % de los votos. Menos, si cabe, de aquel que a finales de febrero de 2008 llenaba el Teatro Pavone de Perugia con más de 1.000 jóvenes con sus modales exquisitos, su aspecto de italiano corriente, su cultura laicista pero cuidadosa con los católicos y su mensaje de renovación total. Veltroni fue un tiempo la esperanza de Italia, como tú fuiste la mía y ahora, como todo en la vida, ambas esperanzas se han evaporado. Unas tardan más, otras menos, pero al fin y al cabo, todas acaban. Sin embargo, me da cosa que todo finalice tan abruptamente. Tus ojos desgarrándose para no volver a mirarme, Veltroni escondido tras una bandera tricolor... Mis primas catalanas me susurran estos días que ya terminaron los tiempos de subversión, de recesión afectiva. Pero para que esto ocurra, necesitaría un Obama que firmara pactos en mi Denver particular. Ayer, en esta ciudad, el presidente de EEUU firmaba un nuevo decreto para inyectar 787.000 millones de dólares en un tiempo de extrema debilidad en la solvencia de la banca estadounidense. El acuerdo entre Congreso y Senado recorta los gastos sociales (siempre pagamos los mismos) y de educación, y modifica las rebajas de impuestos para las clases medias, que ahora será un cheque de 400 dólares, en lugar de los 500 previstos. De unos euros más, unos cinco millones, es el agujero que ha dejado en facturas pendientes de pago el ya ex consejero de Deportes de la Comunidad de Madrid, Alberto López Viejo. La mayoría de ese dinero corresponden a trabajos realizados por la trama corrupta, que cada día nos descubre nuevos y sorprendentes vínculos con el entorno del PP y de Esperanza Aguirre, que se niega a realizar una comisión de investigación como dios manda para depurar responsabilidades, que parecen arraigadas en el seno de su gobierno. A Tomás Gómez y a los suyos no les queda otra que arremangarse y bailar una tarantella al más puro estilo napolitano. Porque, para la lideresa, "la famiglia é la famiglia", como pregona Michael Corleone en El Padrino. Y yo, mientras, sigo esperando que vuelva el mes de mayo por si vuelve a amanecer en tus ojos.

16 febrero 2009

EL CUARTO ESTADO

Era 1901 y Giuseppe Pellizza da Volpedo contaba con la misma edad con que murió Jesucristo, 33 años. En esos momentos la revolución industrial estaba en pleno apogeo y suponía una tentativa de empleo necesaria para muchos campesinos que hacían frente a las crisis de subsistencia. Hoy esa opción no es posible: el capitalismo salvaje y un individualismo descarnado han liquidado los valores de nuestra sociedad y, ahora, derechos tan fundamentales en nuestras constituciones como tener derecho a un empleo y a una vivienda, son utopías. Pertenezco a una generación acostumbrada a una vida fácil, donde nunca se premió el esfuerzo sino la fortuna. Una generación que ha crecido teniéndolo todo y que ahora, siendo la generación más preparada académicamente hablando de la historia, se encuentra ante una dicotomía adversa: preparación versus precaridad. Ahora, la gente como yo, los que pertenecemos a ese cuarto estado plasmado por Pelliza en su obra, hemos alcanzado un nivel tal que ya no hay terrateniente ni señorito que se nos resista. Sin embargo, las empresas, y en ocasiones (muchas) las instituciones públicas, han ideado otra fórmula para seguir rascando de los más débiles. Siempre existirá el "lo tomas o lo dejas". El proletariado ha dejado de tener vida y cuerpo propio. Ahora, los hijos de los obreros como yo se compran un chalet con vistas o se pasean en BMW ´s descapotables, melena lánguida al aire, ataviados con hilos de Dolce & Gabbana y jersey sobre los hombros. En la crisis que ahora vivimos no sólo los bancos y los espeeculadores son culpables. También nosotros, que nos acostumbramos a vivir por encima de nuestras propias posibilidades, olvidando, que hace no muchos años, salíamos a la calle pidiendo que la política laboral, en manos de los señoritos y la rancia derecha, cambiara. Y éstos hacían oídos sordos. Una de esas marchas, precisamente, fue retratada por Pelliza en 1901. El cuarto estado, el que no existía en la división clásica, el proletariado, marchaba en masa desde el campo a la ciudad para trabajar porque en las zonas rurales ya no había futuro. Una vez en la ciudad marchaban en grupos y, a veces, hasta se manifestaban por sus derechos. No conseguían nada. Ahora, parece que también la derecha ha descubierto la calle, quizá con un discurso más etéreo, más demagógico. Cuando veo a Javier Arenas, a Elías Bendodo, a Celia Villalobos , a Antonio Garrido y a miles de personas de bien pasear por el centro de Málaga pidiendo un trabajo digno para los andaluces, me acuerdo de las ocasiones en que mi abuelo, con su sudor y su hambre de posguerra, pidió mejorar sus derechos laborales y entonces los padres y los abuelos de los que marchaban por la calle Larios se negaron porque perdían sus privilegios. Pero ahora el mundo ha cambiado y ya el poder no lo tienen los de siempre. El cuarto estado también está en la derecha. Los dirigentes socialistas no advierten de la peligrosidad de estos quintacolumnistas, y yo pediría que se tuvieran en cuenta, sólo con su existencia se explica que los últimos reductos republicanos (Madrid y Valencia) estén ahora en manos conservadoras, pese a su corrupción y su política trifásica. Hace ahora 20 años, meses antes de la caída del muro de Berlín, Francis Fukuyama escribió un ensayo sobre el fin de la historia. El politólogo estadounidense consideró que la victoria de la democracia liberal sobre el comunismo soviético resolvía los problemas socioeconómicos dentro de las sociedades occidentales y en los países en vías de desarrollo. Declaró, además, que ya no había contradicción entre capital y trabajo. Pero Fukuyama erró, quizá porque no contaba con el aciagado liderazgo de Bush y millones de garrapatas que chuparon hasta el último céntimo de euro posible hasta que la crisis destruyó el circo que se habían montado. Ahora, no tienen otra solución que pasear por las calles malagueñas rescatando la tríada santa: despilfarro, paro y corrupción. Con estos principios, Arenas puso a Chaves contra las cuerdas en 1994. Y dos años más tarde Aznar ganó las Generales. Algunos ya ven llegar los fantasmas del pasado. A mí me gustaría que el domingo hubiese podido estar Pelliza en Málaga con lienzo y pinturas en mano. Ahora las calles pertenecen a la derecha y el cuarto estado son otros.

14 febrero 2009

TIEMPOS MEZQUINOS

Hubiese sido un día perfecto para que me dijeras cuanto me quieres, para que rescataras del cajón de los pasos perdidos aquel bloc escrito a mano que te regalé cuando más escéptica eras ante mis sentimientos. Fue una tarde fría como la de hoy, una tarde de versos silenciosos y eternos dedicados a tu persona, que simbolizabas el amor. Entonces, cuando me querías, y ahora que ya me has olvidado, en la felicidad y en el dolor, la poesía ha sido mi mejor aliada, mi mejor amiga. Hoy nada queda de aquella bella historia, estoy inmerso en un Dürftiger Zeite, tiempos mezquinos, tiempos de penurias, como los calificaba Hölderin. Este poeta alemán del siglo XVIII se preguntaba constantemente para qué y por qué existían los poetas. Safo habló del bello huerto en el que "un agua fresca rumorea entre las ramas de los manzanos, todo el lugar sombreado por las rosas y del ramaje tembloroso el sueño descendía", Mallarmé conoció la desnudez de los sueños dispersos, Santa Teresa recogía las imágenes y los fantasmas de los objetos que mueven apetitos, San Juan bebió el vino de amor que sólo una copa sirve, Cavalcanti vio a la mujer que hacía temblar de claridad el aire, Hildegranda de Bingen lloró las suaves lágrimas de la compunción y tanta belleza de másvida causa el temblor de todo el ser. ¿No será la palabra poética el sueño de otro sueño? Con menos poesía y muchos, muchos sueños (toda una galaxia) recorre estos días Euskadi Patxi López y una legión de socialistas dispuestos a convencer a los vascos sobre la necesidad del cambio en la región. Su media naranja, José Luis Rodríguez Zapatero, ha estado hoy con él en Bilbao y en San Sebastián escanciándo versos y una consigna: "López tendrá las manos libres para pactar". Las encuestas del CIS auguran una apretada victoria del PNV (un sólo escaño por encima de los socialistas) y Zapatero quiere legitimar a Patxi en su formación de Gobierno, lo cual puede llevar a un pacto PSE - PP, lo que significaría un cambio sustancial en el País Vasco. Pero sólo un 4 % de los vascos respalda, según el CIS, un Gobierno sustendado por dos partidos no nacionalistas. Mientras Ibarretxe padece de amnesia (visitó Azpeitia, la localidad de Ignacio Uria, el empresario recientemente asesinado por ETA, sin mencionarlo) y la izquierda abertzale pide que se utilice la papeleta de D3M, a pesar de su anulación por el Tribunal Supremo, Basagoiti pasa de los versos y se centra en los números si logra ser lehendakari y promete hasta 100.000 nuevos empleos en Euskadi. Aunque al bueno de Alfonso, lo que más le irrita, es no ser el centro de atención de sus actos, que se evaporan en persecuciones mediáticas a Cospedal y Esperanza Aguirre por el escándalo de corrupción en ámbitos del PP de la capital. En Galicia, semillero de la derecha española, el candidato de los populares, Alberto Nuñez Feijóo, ha diseñado una campaña personalista, alejándose de la marca PP, en horas bajas. También lo son para el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, que ha decidido, personalmente, dedicar una de las calles del centro de la ciudad al fundador del Opus Dei, san Josemaría Escrivá de Balaguer, con el volátil argumento de que se trata de un aragonés universal. Belloch ha tenido que comerse las declaraciones del histórico diputado constituyente, y hoy su número dos en el consistorio maño, Antonio Piazuelo, quien ha recordado al alcalde que "uno de los últimos gobiernos de Franco, con participación de cuatro ministros del Opus, sentenciaron las últimas condenas a muerte" en este país. Mi san Valentín ha estado tan vacio como la maleta que traía de vuelta a Málaga, donde mañana el PP sale a la calle demagogicamente para pedir un empleo digno mientras la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, trae a los ciudadanos las soluciones adoptadas por el Ejecutivo. Al menos, te he visto sonreír mientras soplabas las velas de un feliz cumpleaños, tú que dices cumplir carnavales en lugar de primaveras, lo cual no está tan mal porque el carnaval siempre es un tiempo de risas. Sin embargo, a pesar de tus recuerdos, de mis poemas y de san Valentín, hoy es un día triste. Hoy, y tras 20 horas declarando, el ex novio de Marta del Castillo, la joven sevillana desaparecida hace más de dos semanas, ha cantado el involuntario homicidio de la chica. Y se nos ha caído el mundo encima. Para tragedias como éstas, no valen poemas, ni recuerdos ni bellas historias de amor en un tiempo en que creímos tener el cielo a nuestro alcance. Ni siquiera tu sonrisa mientras soplas todas tus vivencias y conviertes en cenizas todo lo que has soñado, todo lo que has querido, todo lo que te ha hecho sufrir. Ahora llegarán mis poemas. O tiempos mezquinos, de penurias. Hölderin nos abandonó hace tres siglos. Pero la poesía siempre convivió con nosotros. Incluso en tiempos de miserias como éstos.

04 febrero 2009

VÉRTIGO

Agallas, las de Rita Borsellino, hermana del juez Paolo Borsellino asesinado, junto al también juez Giovanni Falcone, por la mafia siciliana. Esta mujer de 60 años intentó en la primavera de 2006 cambiar Sicilia, la isla afligida por la mafia y el subdesarrollo endémico. Se presentó, sorprendentemente, bajo las siglas de La Unión, de centro - izquierda, a la presidencia regional. No la consiguió, pero no tuvo miedo al vértigo. Hoy día, Rita Borsellino es líder de la oposición en el Parlamento siciliano. El fenómeno que encarna esta mujer viene de muy atrás, de cuando los asesinatos casi consecutivos de los jueces Giovanni Falcone y Paolo Borsellino (julio de 1992) pusieron al Estado italiano contra las cuerdas. En aquellos meses de 1992, justo cuando Eluana Englaro tuvo aquel accidente de tráfico que le atrapó en una vida que no vive, rugía la operación anticorrupción llamada Manos Limpias, las instituciones y los partidos tradicionales empezaban a venirse abajo y Sicilia parecía condenada a permanecer a los pies de la mafia. La muerte de los jueces y sus escoltas provocó una llamarada de indignación popular, a la que se sumó la propia Rita: abandonó su empleo como farmacéutica e inició una cruzada personal contra las organizaciones mafiosas. Borsellino tenía una causa, que era la suya propia y la del resto de Sicilia. En 1995 fue elegida vicepresidenta de Libera, una asociación antimafiosa fundada por el sacerdote Luigi Ciotti. A partir de entonces se dedicó a recorrer las escuelas sicilianas y de toda Italia para difundir un mensaje regeneracionista, como Adriano y yo nos recorrimos toda la provincia de Roma entre abril y mayo de 2006 buscando el voto socialista para Rosa nel Pugno. Borsellino adquirió notable popularidad recorriendo el país, algo que pasó inadvertido para los partidos políticos. Cuando llegaron las primarias de La Unión, Borsellino se presentó ante la sorpresa de muchos, pues no estaba afiliada a ningún partido político, es católica practicante y de ideas más bien conservadoras. El efecto Borsellino fue imparable y logró la nominación. "La mía es una candidatura de discontinuidad, un intento por acabar con una situación que se hace eterna", decía. En una entrevista realizada antes de las votaciones le recordaron que el presidente del Gobierno, Silvio Berlusconi, aseguraba que el gobierno conservador de Sicilia seguía "el camino abierto por Paolo Borsellino". Rita preguntó entonces a la periodista si Il Cavaliere no cayó fulminado al decir semejante absurdo. La entrevistadora fue rotunda: "no". "Eso es señal de que no existe ya la justicia divina", remató la candidata. Pues según parece, no. Y cuando Berlusconi anda de por medio, mucho menos. Silvio se vende como un hombre hecho a sí mismo, pero tiene un pasado oscuro. No, no existe justicia divina, pero la Iglesia sigue haciendo, redactando justicia. "El Gobierno ha sido valiente y nos ha escuchado". De esta manera revelaba la Curia, sin un sólo atisbo de pudor, su crucial influencia a la hora de convertir un asunto judicial particular en el instrumento que ha permitido a Berlusconi abrir un gravísimo conflicto institucional. Me refiero al caso de Eluana Englaro, una mujer que desde 1992 está en coma. Que se alimenta gracias a una sonda. Que respira, aunque no tiene conciencia y cuya corteza cerebral está en necrosis. Sus padres se aferran al último deseo de Eluana: morir dignamente. Pero Berlusconi ha hecho de una sentencia favorable a la suspensión de la hidratación y la alimentación de Eluana, su cruzada particular. Ante el diktat khomeinista de la Iglesia de Ratzinger, que considera un asesinato respetar la voluntad última de Eluana, el Gobierno de Berlusconi ha violado cualquier norma y procedimiento con tal de imponer la voluntad torturadora de la Iglesia jerárquica. Il Cavaliere ha decidido abrir un verdadero casus belli, declarando su intención de cambiar inmediatamente la Constitución para poder gobernar sistemáticamente con decretos - ley, saltándose los debates parlamentarios, proclamando así, abiertamente, su pulsión de dictadura. Italia entra en un periodo de emergencia democrática absoluta, más grave aún porque Europa parece no darse cuenta de la seriedad de la vocación totalitaria berlusconiana. El proceso de Eluana no tiene vuelta atrás y cumplirá su intención de morir dignamente, le pese a quien le pese. Ella no tiene vértigo a la muerte, sino a seguir viviendo en esas condiciones. Italia, sí tiene vértigo, o al menos una parte de Italia, acostumbrada ya a los excarceos de Berlusconi con el más boraz de los fascimos. Como vértigo tengo yo cuando después de toda una eternidad me escribes un mensaje. Puede que seas inmensa en mí, como pensé la otra tarde frente al mar. Pero ahora siento vértigo cuando te pienso, y siento que ya no puedo creerte como tampoco puedo creer a la Iglesia. Ni a veces a mi partido. El otro día nos visitó Bertone, el número dos de Ratzinger en el Vaticano. Repartió a diestro y siniestro y el Gobierno no hizo nada de nada. La promesa de Zapatero a los compromisarios del último congreso del PSOE ("pisaremos el acelerador del cambio, no nos van a detener") ha topado con la Iglesia de Roma, como tantas otras cosas de mi vida se han topado ya con esta ciudad. No habrá avances en la laicidad del Estado. Se veía venir desde que en la pasada legislatura, el Gobierno aumentara un 34 % la financiación de los obispos con dinero público. También aceptó entonces la renuncia de los prelados a su solemne compromiso de autofinanciarse. Resueltas tan generosamente las eternas disputas, el Gobierno pensó que el Vaticano y la Conferencia Episcopal suavizarían sus execraciones. No ha ocurrido. Roma sigue percibiendo al Gobierno de Zapatero como una amenaza de contagio sobre Europa. No habrá reforma en el viejo concordato nacionalcatólico, como pretendía el ahora desaparecido Caldera. Los estrategas del PSOE sostienen que un enfrentamiento grave con la Iglesia cuesta a su partido dos millones de votos. Es el vértigo que disculpa la luna de miel que estos días han escenificado en La Moncloa Bertone y ZP.

03 febrero 2009

LA INSURRECCIÓN DE LAS LENGUAS

Podría aprender a decir te quiero en muchos idiomas, pero me bastaría con decirlo en uno sólo para que supieras que sigo encadenado a tu sonrisa. Recuerdos que no se lleva el paso del tiempo, ni siquiera ese tornado que sí ha sido capaz de desolar Málaga en cuestión de minutos. Los rayos y truenos asustaron a muchos. A mí me sonaron a una bella balada de Ligabue, acostumbrado a otras veleidades desde que no hablamos el mismo idioma, o mejor dicho, desde que hemos perdido cualquier forma de comunicación. Mis miedos son otros. Entre ellos, por supuesto, no poder aprender el perfecto axioma de un te quiero en cientos, miles de lenguas, y tener que dejar en el tintero, como si no sintiera ya nada por ti, las cosas que aún me guardo. Quizá mañana vuelvas a escuchar esa bella expresión de mis labios, o quizá pase una eternidad sin que suceda. Una eternidad, casi setenta años, lleva Maximiliana Pérez sin hablar el potón, su lengua materna. Al cumplir apenas los siete años, sus padres la entregaron a otra familia que, a diferencia de ellos, sí podía alimentarla. No hablaba una sola palabra en español. La entonces pequeña debió aprender el idioma a la vez que aprendía los oficios de la casa. Unos años más tarde, la familia que la recibió se mudó a la capital y se la llevó consigo. Cuando Maximiliana tuvo edad y valor para visitar sola su antiguo cantón en el nororiente de El Salvador, de su lengua ya sólo le quedaba el recuerdo de la sensación al hablarla y unas pocas palabras infantiles. Cuando en el país se llevó a cabo el primer estudio sobre su idioma, ya no había hablantes. Los últimos habían sido registrados a finales de los años setenta. Con el kakawira o cacaopera (otro idioma de la región) sucedió algo similar: una lengua que había estado allí desde hacía siglos desapareció en menos tiempo de lo que un ser humano tarda en nacer y morir. Con esa lengua se perdieron también las historias de esa región y su manera de entender la vida. Los pocos nombres de lugares que han quedado como testimonio de que alguna vez existió son pronunciados vez tras vez en las aulas junto a algunos lamentos por no haber sido rescatada o, en su defecto, estudiada y registrada cuando aún se estaba a tiempo. Es por ello, por lo que en ocasiones pienso que debería aprender todas las lenguas del mundo, todos los idiomas, para no dejar atrás ningún te quiero de los que guardo para ti. Mañana podría ser demasiado tarde para decirtelo. Donde nunca es demasiado tarde para los escándalos urbanísticos es en Marbella. Antes con el GIL y ahora con el PP, más de lo mismo. Resulta que ahora, la alcaldesa de la localidad, María Ángeles Muñoz, ha promovido un expediente de deslinde por el que más de 100.000 metros de terrenos pertenecientes a sociedades vinculadas a su marido, a su cuñado, a un ex teniente de alcalde del GIL y a varias empresas radicadas en paraísos fiscales se convertirían en urbanizables al pasar a formar parte del PGOU de la localidad vecina de Benahavís. Un lamentable episodio político más, y otra vez protagonizado por el PP, como los casos Fabra, Martín Serón, Totana... Afortunadamente siempre quedarán dirigentes que, como mi amigo Joaquín Esquina, alcalde socialista de Cuevas del Becerro (Málaga) denuncien los casos de apropiación indebida, malversación de fondos públicos y demás tropelías. Bravo por él, por ellos. Algo muy distinto sucede en las filas de IU, cuyos militantes y simpatizantes dieron un baño de multitudes a Cayo Lara la otra tarde en Sevilla, la ciudad del nomehadejado. IU salía a la strada en defensa del empleo, frente a la crisis y contra el Gobierno. Una falta de responsabilidad y un doble racero, porque aparte de que ni tan siquiera han propuesto una medida para paliar la crisis, un día antes habían tomado la calle para manifestarse a favor del régimen cubano. Un hecho que cubre de aprobio a una izquierda que se dice demócrata, que se llena una y otra vez la boca con las palabras derechos humanos, pero que a la hora de la verdad es incapaz de denunciar los atropellos de una dictadura. El colmo del cinismo es que haya sido precisamente el secretario de Derechos Humanos de IU uno de los encargados de llamar a la movilización, despreciando así los informes de Amnistía Internacional. Cuesta creer que la izquierda que este sábado se manifestaba en Madrid a favor de una dictadura sea la misma que se desgañita contra Israel. Quizá sea que la lengua (y la razón) del comunismo hace muchos años que se perdió y que sus integrantes, como Maximiliana, ya no recuerdan el verdadero elixir de su existencia.